sábado, 24 de noviembre de 2007

A la deriva


A LA DERIVA
UNA HISTORIA ESPELUZNANTE PARA UN THRILLER PERFECTO
OPERA PRIMA DE HANS HORN, BASADA EN HECHOS REALES

Un grupo de antiguos compañeros deciden pasar un fin de semana a bordo de un yate de lujo. Todo parece ser diversión . Recuerdos de viejas épocas. Pero también afloran viejos temores. Como el calor es fuerte, deciden bañarse en el mar, pero un incidente no les permitirá disfrutar de la sensación de placer que les ofrece el mar. Cada uno tratara de sobrevivir sacando a flor de piel lo peor de si mismo.
Basada en hechos reales, fue filmada en el pequeño pueblo pesquero de Gozo, Malta. Gran parte de las escenas de acción se rodaron con cámara en mano logrando transmitir las sensaciones de terror de los personajes. El 80% de la película se desarrolla dentro del mar.

FICHA TECNICA
A LA DERIVA ("Open Water 2: Adrift", Alemania, 2006)
Dirección: HANS HORN. Producción: DAN MAAG Y PHILIP SCHULZ-DEYLE. Producción ejecutiva: STEPHAN BARTH. Guión: DAVE MITCHELL Y ADAM KREUTNER. Fotografía: BERNHARD JASPER. Música: GERD BAUMANN. Montaje: CHRISTIAN LONK. Diseño de producción: FRANK GODT. Vestuario: KISSI BAUMANN. Maquillaje: GEORG KORPAS. Sonido: RENE MIKAN, GUIDO ZETTIER. Efectos visuales: ANDREAS VRHOVSEK. Duración: 95’. Distribuye: GIJEF S.A.
Intérpretes: SUSAN MAY PRATT (Amy), RICHARD SPEIGHT JR. (James), NIKLAUS LANGE (Zach), ALI HILLIS (Lauren), CAMERON RICHARDSON (Michelle), ERIC DANE (Dan), WOLFGANG RAACH (Padre de Amy), ALEXANDRA RAACH (Pequeña Amy), ALFRED CUSCHIERI (Viejo pescador).

Sobre el director

El director de A LA DERIVA, Hans Horn, nació el 11 de junio de 1968 en Bad Tölz, Baviera. Cuando terminó el bachillerato, Horn ya había producido y dirigido varias películas. Su primer documental, “Memento”, ganó el primer premio en la competición de aficionados de la cadena de televisión de Baviera BR. Mientras estudiaba en la escuela de cine de Munich, Horn desarrolló varias obras de ciencia ficción, entre las que se encontraban dos proyectos para largos titulados “Hunters Of The Edge” y “Unnatural Bodies”. Después de sus cortos “Schwarz Weiss” y “Wolpodzilla” (la primera película Baviera de Godzilla), le siguió “Easy Day”, que obtuvo una nominación a un Oscar en 1998. “Easy Day” se pudo ver en numerosos festivales nacionales e internacionales de cine (premio al mejor productor en el Festival Internacional de Escuelas de Cine de Munich, Fantasy Filmfest, Tel Aviv, Bruselas y muchos otros). En 1996, fue el director de 2ª Unidad de la película “Bandits” dirigida por Katja von Garnier. Una vez finalizados sus estudios en la escuela de cine, Horn trabajó como director comercial para la productora Young Guns. Desde 1999, ha estado representado por la agencia alemana, 1rst Unit, especializada en anuncios publicitarios y videoclips musicales. También firmó con la agente Jeanne Williams de ICM (Internacional Creative Management) y el director Michael Goldman (Tollin-Robbins Filmproduktion) con el que actualmente está desarrollando dos proyectos en Hollywood. Después de ganar el premio ADC-Gold, y estar representado en Cannes en la preselección de candidatos por su spot para SMART “Fat Men Walking” en 2002, firmó con CAA (Creative Artists Agency). Hasta 2005, desarrolló varias obras en Hollywood para Senator Entertainment / Mandate Pictures y Radas Interscope, entre los que se encuentran títulos como “Transit” (thriller), “They” (terror), “Boogeyman” (terror), y “Thirsty” (terror con un toque de spaghetti western).


NOTA DEL DIRECTOR

“Mi esposa Tina fue la que originalmente me contó el suceso real que sirvió como base para A LA DERIVA. No podía creer como el destino había traicionado a estos seis amigos. Intenté ponerme en su situación. ¿Y si Tina y yo fuésemos los que estuviésemos estancados en el agua sin poder subir al barco?, ¿Qué haríamos?, ¿Cómo sobreviviríamos?, sin ninguna esperanza de rescate, ¿Moriríamos realmente? El escenario de esta pesadilla me golpeó con un miedo elemental. Me fascina explorar y enfrentarme a mis propios miedos. Por ese motivo, la historia captó mi atención desde un principio. Asimismo, la simplicidad del concepto me resultaba muy atractiva. Inmediatamente, comencé a jugar con la idea de adaptar la historia a una película. Al principio, pensé que la idea era tan comercial y atractiva, que encontraría fácilmente al productor de la misma. Intenté convencer a mi agente y manager de Los Angeles de que A LA DERIVA sería un thriller perfecto. Nueve meses después de oír la historia de boca de mi mujer, comenzamos la preproducción en Malta. El motivo principal de este éxito parece que reside en la simplicidad de la historia, y en la universalidad del miedo esencial que evoca. Estos dos elementos guiaron mi acercamiento creativo a la película.
Durante nuestras reuniones iniciales, quedaba claro que seríamos un equipo “a prueba de agua”. Nos planteamos transmitir esta simple idea de la forma más interesante y conmovedora. El formato cinemascope de pantalla amplia abriría más el fotograma, permitiéndonos ver la infinita amplitud del océano, ubicándonos en el mismo lugar de los protagonistas que se sienten tragados por su entorno. Asimismo, el grano del 16mm suponía una ventaja para mí. La sensación granulosa realzó en gran medida el efecto psicológico de la película. En algunas escenas, añadimos más grano para aumentar el efecto. En las escenas dramáticas clave y en las de acción, usamos efectos de obturación combinados con movimientos de cámara discordantes para maximizar el impacto emocional. Evité la estilización simplemente porque tomé una decisión deliberada de que cada secuencia importante tuviera su propio estilo de encuadre para distinguirse la una de la otra. Igual de importante fue la tarea de preparación de los actores para el estrés psicológico y físico de sus papeles. Desde el principio, tomé la decisión de rodar en un orden cronológico. La película debía reflejar autenticidad. Al rodar en orden cronológico, tenía la esperanza de que según fuese transcurriendo la historia, el estrés se reflejaría en los rostros de sus personajes. Afortunadamente, valió la pena. Y a pesar del estrés físico del rodaje, fue agradable trabajar con este excepcional equipo”.


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